¿Qué más da el día que te mueres? ¡Lo importante es que te mueres!
Grga Pitic, un mafioso gitano que controla los vertederos de basura, y Zarije, el orgulloso propietario de unas obras de cemento, son amigos desde la infancia. Ahora tienen ochenta años, han sobrevivido juntos a todo tipo de aventuras y se profesan un profundo respeto. Estando Zarije en el hospital, su hijo Matka acude a Grga para pedirle dinero. Él y su socio Dada lo necesitan para hacer un gran negocio vendiendo petróleo en el mercado negro. Pero las cosas salen mal y, entonces, Dada amenaza de muerte a Matka si no consigue que su hijo se case con su única hermana soltera. Pero, naturalmente, el chico está enamorado de otra...
Corría el año 1998 y allí estaba yo a mis 28 años (uff que me delato) viendo en los cines Alfaville de Madrid Gato negro, Gato blanco de Kusturica, había oído hablar de él y de “Tiempo de Gitanos” pero aún no las había visto y a raíz de ver “Gato negro, Gato blanco” supe que tenía que ver todo lo que hubiera creado este Serbio de pro. Me mostró mundos de los que yo desconocía totalmente su existencia y me recordó, en cierto modo, a las películas agridulces italianas que tanto me gustan.
Recordatorio personal: Las noches de Cabiria, La strada , Amarcord
Me gusta que los directores impriman su marca personal, en el caso de Kusturica es que siempre hay boda.
Cuando termina todo el proceso de la Perestroika de Mikhail Gorbachev en la antigua Unión Soviética y el Cinturón de Hierro empieza a desmoronarse. Todos estos pueblos desamparados pero a su vez esperanzados por el nuevo futuro se inclinan a las mafias, el narcotráfico y el crimen organizado. Los padres de la patria mueren de viejos, los jóvenes mueren asesinados. Es un balance crudo que se entiende entre líneas en esta farsa costumbrista tan divertida de Kusturica. Los gatos son los observadores y acompañantes de la historia, gracias a ellos somos conscientes de los absurdos, de las cabriolas y de las artimañas de cada uno por sobrevivir a este fuego cruzado. Hay un momento especial de la peli donde preguntan, quiénes van a ser los testigos, se responde desfachatadamente ¡«los gatos»! y no parece tan desequilibrado, ahí es donde creo verdaderamente está la esencia de ellos como personajes invaluables en la historia.
“Se acurrucaba debajo de mi abrigo para calentarme el corazón"
Siempre amenizada por esa música folkrorica que cuando la escuchas involuntariamente estás moviendo alguna parte de tu cuerpo.
La No-Smoking Orchestra es una banda de rock gitano de la ex Yugoslavia formada en los años 80 por Nenad Jankovic (más conocido por Dr. Nelle o Nele Karajlic) con el nombre de "Zabranjeno Pusenje", en serbio-croata "Prohibido Fumar".
Kusturica se unió al grupo por primera vez en 1986, como bajista, conociéndolos durante la filmación de su película "Recuerdas a Dolly Bell?". La banda grabaría cuatro discos antes de la separación: "Das ist Walter (este es Walter, tributo a la película "Valter Brani Sarajevo" de Hajrudin Krvavac), "Dok cekas sabah sa sejtanom" (esperando por el infierno con el diablo), "Pozdrav iz zemlje Safari" (Los mejores deseos de la tierra de los safaris) y "Male price o velikoj ljubavi" (Pequeña historia de un gran amor).Entretanto Kusta, como le dicen a Kusturica, se consagraría con "Tiempo de Gitanos" (1989), una historia de amor y (des)lealtades en torno de un clan de Zíngaros mafiosos que resume lo mejor de su estilo, poderosamente sensible y original.
Luego vendrían Sueño de Arizona, Underground (su toma de posición más explícita, y polémica por cierto, respecto de la tragedia yugoslava) donde el Dr. Nelle actúa como un gitano tocando acordeón sobre un tanque y Gato negro, Gato blanco, cuya banda sonora, realizada por primera vez por la TNSO, gana la Palma de Oro en Cannes por la mejor música, que venía de rearmarse en 1994 con la incorporación del batería Stribor Kusturica, hijo de Emir. Puede decirse que Gato negro, Gato Blanco incluye el primer hit internacional del grupo: ahí se ve a ese repugnante gitano mafioso, cocainómano y traidor, colocarse cada vez que estalla el estribillo de “Pitbull Terrier”, una explosión de sobrecarga anabólica de eso que sus autores bautizaron el sonido “Unza Unza”.
- No me casaré, no quiero ¡No quiero! Escúchame bien, un día aparecerá el hombre de mi vida y me casaré con él.
- ¡No te atreverás! ¿me oyes, eh? ¿Quién es? ¡Anda, dime!
- Te aseguro que cuando aparezca le reconoceré, le he visto cientos de veces en mis sueños, conozco sus facciones, sé cómo son sus ojos, su pelo, su cara, sus labios...y es alto... ¡muy alto!
"Lo que no puedas solucionar con dinero, soluciónalo con mucho dinero".
Director: Emir Kusturica- “Underground”, “Tiempo de Gitanos”, “La vida es un milagro” “Prométeme”, “Papà está en viaje de negocios”
GUIÓN: Gordan Mihic & Emir Kusturica
MÚSICA: Dr. Nelle Karajlic
FOTOGRAFÍA: Thierry Arbogast
REPARTO: Bajram Severdzan, Branka Katic, Florijan Ajdini, Jasar Destani, Zabit Mehmedovski, Srdjan Todorovic
PREMIOS: 1998: Venecia: León de Plata; mejor director
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